Las fechas de siembra cambian con la finalidad de ofrecer las mejores condiciones climáticas a los agricultores al momento de sembrar. De ahí que la fecha óptima varía entre cada cultivo y cada región.
Para determinarla hay que considerar distintos aspectos como la temperatura ambiental y la del suelo, esta última está dos grados por debajo. Otro factor importante es la lluvia, no porque el cultivo dependa de su riego, sino porque el agricultor necesita que no llueva para trabajar la tierra y realizar una siembra efectiva.
Las mediciones de la temperatura dependen de las necesidades del agricultor y de sus tiempos, sobre todo para quienes tienen grandes superficies que sembrar. Esto es muy importante porque de no tener el control adecuado y no sembrar en condiciones óptimas, el rendimiento final se verá afectado.
Control casi total.
De acuerdo con los especialistas, a pesar de que no se puede controlar el clima, deben revisarse las estadísticas de años anteriores para asegurar la toma de mejores decisiones. Esto es complicado porque debido a los cambios climáticos, muchas veces las condiciones son adversas y diferentes a como eran con anterioridad.
A pesar de esto es importante respetar las fechas de siembra para minimizar los daños en caso de que se presenten problemas más adelante. Por eso es importante respetar esas fechas óptimas para que evites esas condiciones climáticas al momento de floración o cualquier otra etapa crítica
Llegar a tiempo.
El rendimiento es mayor en una fecha de siembra óptima que en una tardía o una temprana. Aquí se puede obtener el mayor potencial de los híbridos. Depende mucho del manejo y de las condiciones ambientales, pero estadísticamente de los últimos diez años a la fecha, sembrar en fechas óptimas ofrece de 10% a 15 % más de potencial de rendimiento aproximadamente.
Cuando el agricultor es pequeño no importa el día porque puede sembrar en otro momento, pero cuando es un agricultor de mucha superficie tiene más problema en cubrir todos sus terrenos en tiempo.
“Las fechas tardías son temperaturas muy cálidas y esto hace que el cultivo se adelante o se acelere porque la planta se desarrolla con base en la temperatura: cuando hace más calor, el ciclo se acorta, se acelera el desarrollo. Por otro lado, si hay frío durante la etapa reproductiva el cultivo tiende a alargarse”, comentan los especialistas.
Ejemplo de caso: Sinaloa.
Para el caso del maíz en Sinaloa, por ejemplo, la temperatura ambiental oscila entre 18 y 30 grados centígrados, mientras que la del suelo va de entre 18 y 22 grados centígrados.
En Sinaloa, las fechas de siembra óptima empiezan de la parte norte hacia la parte sur del estado, antes de esto se consideran fechas tempranas y después fechas tardías. Esto es:
Sin importar la región en la que estés, esta información la puedes consultar con tu Distribuidor Autorizado DEKALB® o tu asesor, así sabrás cuál es la fecha de siembra óptima en la zona en la que te encuentras.